O quizá antes lo dijera Lord Byron
Si corre, vuela o navega, se inteligente y alquílalo. Esta frase se le atribuye entre otros al gran Flavio Briatore, y es una de esas verdades de las que te das cuenta cuando has hecho todo lo contrario. Si atendemos al tiempo de uso, desgaste y disfrute de cualquier cosa que corra, vuele o navegue, y salvo que en el caso de que corra, tengas la capacidad y suerte de que sea un clásico, léase un Aston Martin DB5, será siempre la peor inversión que hagas, tras como otros muchos dicen, los hijos y los matrimonios, por lo tanto, si quieren disfrutar de un mes a bordo de un barco, de una semana al volante de un deportivo de ensueño, o porqué no, de un vuelo privado a Paris con una dama a la que impresionar, alquilen, es caro, lo sé, una semana a bordo de un Aston Martin db11 ronda los 4000 euros, caro sin duda, pero sumen el tiempo de uso real de ese coche, seguro, revisiones… y calculen. Yo lo he hecho, y una semana desde Madrid a Biarritz, 7 días, con parada en San Sebastián, dormir en hoteles 5 estrellas, comer en grandes restaurantes, y disfrutar del lujo del viaje y zona, unos 8.000 euros. No esta nada mal, pero realmente, como pobre mortal, solo tengo 4 semanas de vacaciones, añadan otra en Europa, otra en un crucero por el mediterráneo con un grupo de amigos en un velero, y una última en la Manga del Mar Menor recordando viejos tiempos, y el coste de todo esto no sería superior a los 20.000 euros al año, alquilen, sin duda, y empleen su paga extra, bonus o el fruto de una buena inversión en alquilar algo que corra, vuela y navegue, y sobre todo disfrute, de poder al año siguiente, cambiar el objeto que vuela, navega y corre, por otro distinto.
Mejor aún que alquilar, es pedir prestado, y lo sé, esto es quizá lo mas complicado, la economía colaborativa de gente con clase y buen gusto, y pese a que ha habido clubs que han estado por la labor, mezclar un Aston Martin, con Ferraris, Mercedes o Lamborghini, me parece tan de mal gusto, como hacerme elegir entre unas vacaciones en Ibiza o unas en las costas de Biarritz en Le Miramar. Por lo tanto, sigan mi consejo, y piensen en alquilar no en comprar, en momentos, no en obligaciones, en equivocarse con margen de error, en renunciar a la posesión de algo, salvo que sea un reloj, una pluma, un perfume o su vestidor, esto nunca se debe alquilar, prestar o compartir, las modas basadas en uno de los pecados capitales, la envidia, de alquilar para presumir, un bolso, unos zapatos o un reloj, me parecen una aberración comparable, a salir con zapatos blancos a cenar con amigos a Horcher una noche de Sábado. Y alguno dirá, esta usted defendiendo el alquilar frente al comprar, bien, un reloj, o unos zapatos, ni vuelan, ni corren ni navegan, y esto es una máxima, recuerden, si no es así, cómprenlo.