Escucha el podcast sobre Venecia aquí

“Saludó al  mar con los ojos, 

y  su corazón se llenó de alegría

al contemplarse tan cerca de Venecia.”

Thomas Mann

VENECIA ENAMORA

La Serenísima República de Venecia como se llamaba a la ciudad de Venecia desde el siglo IX hasta 1797 se constituyó como Estado durante la Edad Media y fue una de las principales potencias económicas del mundo.

Venecia, a orillas del Adriático, podemos decir que es una de las ciudades más bellas del mundo a la que Vivaldi y Monteverdi, entre otros, le pusieron música (como la que escucharemos durante el programa de hoy), la que Canaletto plasmó con maestría en sus lienzos, la que rondaba Casanova en busca del amor eterno o no… una ciudad que enamora a todo viajero que llega a ella con ganas de explorarla y experimentar experiencias únicas y “repetibles” por supuesto.

Hoy queremos proponeros una escapada de 48 o 72 horas en la que podamos visitar sus monumentos y lugares más imprescindibles, tomarnos un capuccino en sus cafés históricos, como el Florián, perdernos por sus callejuelas y recónditos rincones y, porque no, deleitarnos con la música renacentista y barroca en sus iglesias y palacios.

Y ahora que los días se acortan y la luz de la farolas venecianas tiñen de magia el reflejo del agua causando un efecto que no olvidaras, es un momento ideal para escaparse a Venecia pues existe una Venecia para cada uno. Ha llegado el momento de hacerla tuya.

Barrio de San Marcos

Nada mejor que iniciar nuestro recorrido por Venecia en la Piazza San Marcos y caminar por ella hasta dar con nuestros huesos en el mítico Café Florián donde parece haberse detenido el tiempo en 1720 para que podamos tomarnos un rico capuccino que, eso sí, te costará un poco caro pero la experiencia merecerá la pena. Con un poco de imaginación podrás ver a Vivaldi o el mismísimo Lord Byron sentado en el café escribiendo sus obras.

Con las pilas recargadas visitaremos la gran Piazza San Marcos pues es en este lugar donde se concentran los monumentos más importantes de la ciudad. El Palacio Ducal, el Puente de los Suspiros, bello puente de estilo barroco, que unía el mencionado Palacio Ducal con la Prisión y que debe su nombre a esos suspiros que los presos de la Inquisición emitían al cruzar el puente camino de su ejecución. Después recomendamos subir al Campanile con sus 98 metros de altura (pero tranquilo que hay ascensor) ofrece una de las mejores panorámicas de Venecia. 

Pero el monumento más destacado es la Basílica de San Marcos, maravilla del arte bizantino, en el que te recomendamos subir a su mirador superior, situado justo sobre los arcos de la fachada principal con réplicas de sus famosos caballos de San Marcos ya que los originales, la cuadriga original, se encuentran expuestos en un museo dentro de la propia basílica. Las réplicas se realizaron para evitar que los caballos originales se deteriorarán por las inclemencias del tiempo y por los excrementos de las palomas que hay en la plaza.

Sin casi darnos cuenta habremos llegado a la hora de la comida y tendremos que reponer fuerzas. Una buena opción, y ya que estamos cerca, es comer en el restaurante-terraza del Hotel Danieli, situado en el último piso del célebre y clásico hotel. Estés o no a dieta, no te resistas a probar sus platos clásicos: Tortellini Gorgonzola o sus Spaghetti Benedetto Cavalieri. Un consejo: no tomes postre y de camino al Puente de Rialto pásate por una heladería y disfruta de un cremoso heladito.

Barrio de Rialto

El Puente de Rialto es el puente más antiguo de Venecia y uno de los más bellos junto con el Puente de los Suspiros. Construido en piedra entre 1588 y 1591 substituyó al anterior realizado en madera y llegó a ser el centro del comercio veneciano. Cruzando el puente desde la zona de San Marcos llegarás al Mercado  Rialto, lugar colorido por la venta de frutas y verduras, que existe desde el año 1092.

Aunque habremos cruzado el Puente de Rialto vamos a dejar para otro momento de nuestra escapada la visita al otro lado de San Marco. Volvemos a cruzar el puente para seguir nuestro paseo callejeando en búsqueda de lugares curiosos como son la calle Varisco o la librería Acqua Alta.

La calle Varisco, en la zona de Cannaregio, es una de las calles más estrechas del mundo que tan solo tiene 53 cm de ancho y que desemboca en uno de los canales venecianos, aunque hasta llegar a ella habrás visto otras muchas calles y callejuelas que te alejarán de la realidad. 

Continuaremos callejeando hasta encontrar una de las librerías más curiosas que habrás visto nunca, Acqua Alta (Marea Alta). Es un lugar alucinante con libros por todos lados, con un olor a libros viejos que hace envolverte más aún en una atmósfera decadente y ecléctica que cautiva, con pilas de libros una tras otra con literatura de todas la épocas. Te guste o no la literatura, es un lugar que no debes perderte. Dentro de la tienda góndolas, barcas y bañeras repletas de libros, maniquíes con máscaras de Carnaval y algunos gatos sabios pues vivir entre libros les impregna de esa sabiduría increíble que tienen los felinos bibliotecarios. Su nombre Marea Alta se debe a que en los días de marea alta la librería se inunda, pues da a un canal, por ello que los libros se almacenan en góndolas, barcas y bañeras.

Podremos seguir callejeando aunque seguro que habremos hecho hambre y tendremos que disponernos a cenar. Una buena opción es subirnos a una góndola para que nos lleve hacia el Gran Canal, a la zona del Puente Rialto, y allí cenar en uno de los restaurantes típicos a orillas del Gran Canal para disfrutar de la gastronomía popular veneciana. En nuestro recorrido habremos visto palacios, iglesias y casas, todos de belleza extrema como esos palacios de estilo gótico-veneciano que seguro Casanova visitaba en noches de luna llena. Observar todos esos nobles edificios nos hace pensar en la grandiosidad de la corte veneciana en su época más dorada y floreciente durante el Renacimiento y el Barroco.

Hoy, te recomendamos cenar pronto para después poder asistir a uno de los conciertos de música barroca que cada día se celebran en diferentes palacios e iglesias de la ciudad. Y si tienes suerte de que haya en cartel la representación de una ópera en el teatro de La Fenice no te la pierdas, es una experiencia única. La Fenice es uno de los teatros de ópera más importante y bellos del mundo. Inaugurado en 1792 y tras dos incendios, 1836 y 1996, ha sobrevivido cual Ave Fénix de hay su nombre La Fenice, que significa el fénix. Si optas por ir a la ópera puedes cenar en el restaurante Al Theatro justo frente a la puerta del teatro La Fenice en la plaza San Fantin. 

Palacios de belleza extrema

Sobre el Gran Canal es donde encontraremos los palacios y edificios más bellos de Venecia. Ejemplo de ellos son el Palacio Grassi, un imponente edificio construido en mármol entre 1748 y 1772, veinticuatro años para construir la residencia de la rica familia Grassi de Bolonia. Hoy día es propiedad del empresario y mecenas Francois Pinault , presidente de un grupo de empresas de marcas de lujo más importante del mundo (Gucci, YSL, Boucheron, Bottega Véneto, Balenziaga, Brioni, Girard-Perregaux, etc) y que está casado con la actriz Salma Hayek. En el palacio se expone parte de la Colección Pinault, y digo parte porque en la Punta del la Dogana hay otro centro expositivo.

Otro palacio, y quizás el más bello de toda la ciudad, es Cá d´Oro cuya fachada de estilo gótico-renacentista destaca entre todos los demás palacios y edificios venecianos. Construido a partir del 1442 representa un buen ejemplo del cambio del estilo Gótico al Renacimiento. Se le conoce también como “Casa Dorada” ya que en su origen la fachada estaba decorada en pan de oro. Hoy día es sede del Museo Giorgio Franchetti que alberga importantes colecciones de arte.

Caminando llegaremos hasta el Puente de Rialto y lo atravesaremos para adentrarnos en el Barrio de Dorsoduro donde callejeando sin rumbo nos vamos a encontrar muchos lugares de gran belleza y pegados al Gran Canal algunos de los monumentos más importantes de la ciudad. También podremos ver restaurantes muy típicos, tiendas y boutiques de ropa vintage callejeando.

En nuestro paseo alcanzaremos la Academia, o Galerías de la Academia, junto al también Puente de la Academia – que cruza el Gran Canal – y donde se encuentra una de las colecciones más importantes de arte italiano con obras de Bellini, Canaletto, Guardi, Leonardo da Vinci, Tiziano, Tintoretto, Veronese, entre otros.

También en un palacio, el Palacio Venier del Leoni, se encuentra el Museo Peggy Guggenheim que si eres amante del arte moderno no debes dejar de visitar. Cuenta con una exposición permanente dedicada a los principales artistas de los siglos XIX y XX con obras de Picasso, Dalí, Chirico, Pollock, Braque, Mondrian, Kandisky, Rothko.

Este museo, referente del arte europeo y americano, existe gracias a Peggy Guggenheim que para evitar la Segunda Guerra Mundial se trasladó a Venecia y nada más llegar mostró su colección por primera vez en la Bienal de Venecia de 1948 y decidió quedarse a vivir en la Serenissima. En su jardín exposición de escultura con obras de Giacometti, Miró, Moore, etc.

Cerca del Museo Peggy Guggenheim podremos ver la Punta della Dogana, también conocida como Punta de la Salute, es una punta de mar triangular donde se unen el Gran Canal y el Canal de la Giudecca y que fue durante muchos años Aduana de la ciudad.Desde ella se tienen unas vistas excepcionales de la Basílica de San Marcos y el Palacio Ducal. En el mismo lugar se encuentra otro de los monumentos más importantes de la ciudad, Basílica de Santa María de la Salud que se construyó en honor a la Virgen en agradecimiento por la liberación de la peste que aconteció en los años 1630 y 1631.

De estilo barroco y planta octogonal resalta su espectacular cúpula y en su interior se pueden ver una extraordinarias obras de TizianoCada 21 de noviembre se festeja la Fiesta de la Madonna della Salute en la que las gentes atraviesan un puente de barcas, que va desde la Plaza de San Marcos a la Basílica para rezar a la Virgen. Es una de las fiestas más populares del Véneto.

Venecia más tranquila

Si en algún momento de tu visita a la Serenissima Venecia sientes que necesitas algo de serenidad y relax, aléjate de las zonas de San Marcos y Rialto. A si que súbete a un vaporetto y pon rumbo hacia Giudeccapara pasear sin bullicio. 

Giudecca está formado por un conjunto de islas separadas de las islas rialtinas que forma parte del sestiere (barrio) de Dorsoduro. En la Laguna de Venecia es un laberinto veneciano de callejuelas en las que es obligado perderte para descubrir que Venecia tiene otros muchos tesoros menos conocidos pero no por ello menos bellos. En nuestro recorrido podremos encontrar algunos monumentos destacados como laIglesia del Santísimo Redentor que es una de las obras más bellas del arquitecto neoclásico Andrea Palladio. Y en la zona oeste de la Giudecca nos encontraremos con una grandísima construcción en ladrillo, de estilo neogótico: el Molino Stucky que en el siglo XIX fue la fábrica de pasta más grande de toda Italia. Tras muchos años de abandono se convirtió en un Hotel de la cadena Hilton y además es un importante espacio cultural y de exposiciones.

A orillas del Canal de la Giudecca es normal ver estudiantes de Bellas Artes tratando de emular al maestro Canaletto plasmando en sus lienzos la vista privilegiada que tienen de la dársena de San Marcos.

Y no deberemos abandonar la Giudecca sin habernos tomado un cóctel Bellini en el famoso Harry´s Bar del hotel Cipriani, en ese mítico bar donde pasaban tiempo Hemingway y Truman Capote y también mítico donde famosos artistas y famosos se alojan para estar más tranquilos cuando vienen a Venecia.

Venecia de cine

Y como Carlos es un gran cinéfilo dedicar un momento cinematográfico a la bella Venecia que ha sido escenario e inspiración de grandes producciones cinematográficas. Algunos títulos como Muerte en Venecia (1971) esa obra maestra de Luchino Visconti quien adaptó la novela del mismo nombre de Thomas Mann. En ella un compositor de mediana edad que padece una depresión se refugia en Venecia huyendo de Múnich. Alojado en un hotel de la isla del Lido se siente atraído por un joven que está alojado disfrutando de las vacaciones con su familia. 

Otras grandes películas son El Talento de Mr. Ripley (1999) y Casino Royale (2006) de la saga James Bond.

Así que busca el escenario perfecto dentro de la ciudad de Venecia – seguro que lo encuentras -, elige el papel que quieras representar. Se Vivaldi o Monteverdi, Se Canaletto o Tiziano, Se en Carnaval Polichinela o Arlequín… pero no quieras ser Casanova que ese papel ya me lo he pedido yo. ¡Lo siento! 

Para expertos golosos

Para los golosos expertos como Carlos Ladero y yo, en Venecia hay unas heladerías en las que perdernos por un rico gelatto. En nuestro paseos venecianos nos encontraremos con muchas heladerías pero hay algunas que son visita obligada como es el caso de La Boutique di Gelatto, en el Barrio de Castellón o en Paolin en San Marcos. No obstante una tartita de Mascarpone será siempre bienvenida.

Y que souvenir comprar en Venecia

Salvo que seas un coleccionista de arte o de antigüedades pues en Venecia encontrarás anticuarios ideales para encontrar piezas únicas, tienes muchas más opciones para hacerte un regalo como puede ser una pieza especial de cristal de Murano aunque yo siempre recomiendo hacerte con una máscara pero que sea una pieza única y no las que venden en puestos callejeros o tiendas de souvenirs. Te vamos a recomendar dos lugares en los que encontrarás máscaras que son piezas diferentes. En La Bottega delMascareri tienes verdaderas joyas.

Ahora bien, si quieres comprar una máscara especial pero además ver vestidos y complementos dignos del mejor Carnaval sin duda debes ir al Atelier Antonia Sautter, una de las empresarias más conocidas de Venecia ya que organiza cada año desde 1994 el famoso “Il Ballo del Doge” la fiesta de Carnaval más glamour osa que existe y que se celebra en un Palacio donde se cena, baila y con puestas escenas que parecen sacadas del Cirque du Soleil. Una fiesta donde todo es magia.

En el Atelier de Antonia Sautter vas a poder ver piezas auténticas de trajes de Carnaval, los vestidos de mujer son realmente fantásticos casi mágicos, además de todo tipo de complementos, sombreros, tocados y las máscaras más bellas que hayas visto. Una visita de la que no re arrepentirás y si tienes la suerte de poder ver a Antonia por su Atelier la experiencia está más que garantizada.

Venecia es como comerse de golpe

una caja de bombones de licor.

                                    Truman Capote